Las psicólogas Andrea Galarreta y Marta Serrada, que están realizando una estancia profesional en la Consulta, escriben este artículo para FilaSiete, en el que ponen de manifiesto la importancia de la salud mental como eje central de la película Enemigos íntimos, y como esta acerca a la población al conocimiento sobre la salud mental y favorece la desestigmatización.
La ficción permite poner de relieve y señalar una parte de la verdad sobre los trastornos mentales que, en ocasiones, la realidad muestra de una forma más velada.
El mediometraje Enemigos íntimos, de 37 minutos de duración, dirigido por José Cabanach e interpretado por Juan Carlos Naya, Alba Galó, Carlos Guglieri, Guillermo Mealla, Sofía Ambrossi y Marina Díaz Marsá (presidenta de la Sociedad de Psiquiatría de Madrid, en el papel de psiquiatra), fue presentado este verano en la Academia de Cine de Madrid.
La ficción permite poner de relieve y señalar una parte de la verdad sobre los trastornos mentales que, en ocasiones, la realidad muestra de una forma más velada. Los prejuicios sobre la enfermedad mental que nos acompañan terminan como sesgos cognitivos que impiden que la verdad aflore y se haga patente.
La «verdad» que permite mostrar especialmente el arte, en este caso el arte cinematográfico, es algo que tiene un potencial curativo. La producción presenta de una forma muy clara la realidad de la patología mental. «El motivo de la película es contar a la población que cualquiera puede tener un trastorno mental. Que podemos ser cada uno de nosotros, y que un abordaje y tratamiento adecuado pueden llevar a una buena resolución», explicaba la Dra. Marsá en la presentación del mediometraje.
Las personas con trastorno mental tienen la responsabilidad de cuidar su enfermedad, pero no tienen la culpa de padecerla, hay muchos factores que pueden influir: como la vulnerabilidad genética o el estrés ambiental. En este mediometraje han querido manifestar diferentes aspectos relevantes como las consecuencias que puede tener la depresión y la dificultad para entenderla de los más cercanos, o mostrar los Trastornos de Conducta Alimentaria, que van mucho más allá de la preocupación por el peso, ya que son una forma de manejar un malestar mucho más profundo que puede originarse por adversidades en la vida de la persona.
Se refiere claramente la relación directa entre el consumo de cannabis y sus efectos insanos, como los brotes psicóticos. El cannabis puede precipitar esa ideación referencial de prejuicio, alucinaciones y propiciar situaciones que cambian la biografía del individuo.
Marina Díaz Marsá apuntó también la necesidad de reivindicar la figura del psiquiatra para poder así desestigmatizar. Refieren ser profesionales que intentan querer a sus pacientes y ayudarles para que puedan tener una vida lo mejor posible. Les ayudan por medio de fármacos muy útiles, que permiten hacer una vida muy funcional y también a través de la psicoterapia.
Del mismo modo, la producción española de Question de Imagen y la Sociedad de Psiquiatría de Madrid, Enemigos íntimos, quiere mostrar que la curación no es exclusivamente fármacos y psicoterapia, sino un cambio de vida. En los personajes se observa que, en la medida en que van dando cabida a la verdad de sus existencias, de su padecimiento y de lo que todo ello supone, es posible lograr la evolución que se contempla en cada uno de ellos. Esta paradoja que el cine permite es sanadora.
Inicialmente la película será proyectada en festivales de cine y más adelante estará disponible en la página web de la Sociedad de Psiquiatría de Madrid. Esperamos que consiga sus objetivos: señalar la conjunción entre el cine y la ciencia, transmitir la cotidianidad de la enfermedad mental y la posibilidad del cambio y la transformación de la vida.
Andrea Galarreta y Marta Serrada. Psicólogas. Consulta Dr. Carlos Chiclana
Comentários